Llegue a creer que no lo merecia

He notado al dialogar con varias personas (hombres y mujeres) que tuvieron una infancia (adolescencia) con necesidades afectivas que les cuesta creer que merecen lo mejor, que sus sueños se pueden hacer realidad; que son valiosas personas.
Si dibujáramos un corazón en un papel podríamos trazar varias rayas que el sufrimiento causado por la pobreza, el poco afecto recibido se ha encargado de trazar dejando secuelas emocionales; es importante hacerles notar que cada día que amanece les regala una nueva oportunidad; enfrenta tu destino con valentía, tu mereces que la vida te regale los mejor
Del Diario Personal de un escritor